Desde hace unos días he recibido amenazas de un tal @Comandante Jairo a través de mi twiter. Me advierte en ellos que me va a "volar como Danilo Anderson", que "vas a morir, escríbelo", me llama "perra" y además dice que de mí "no quedará nada".
Al mismo tiempo y coincidiendo con dichos mensajes, en una reunión de dirigentes comunales en Petare, se confirmó que el tal comandante Jairo iba a hacer justicia en nombre del Presidente teniéndome a mí como "objetivo estratégico primario".
Lamentablemente, estas amenazas del lado oficialista no son nuevas. Hace unos años, un personaje de los círculos bolivarianos del 23 de Enero de nombre Jesús y conocido de Aristóbulo Istúriz se regodeaba advirtiéndome cómo me iba a matar, uno a uno, a mis hijos y me los entregaría por pedazos. Me llamaba constantemente hasta que mi familia dio con él. Una vez identificado el tipo, incluso donde vivía, acudimos a denunciarlo por ante el Ministerio Público. Jamás hicieron nada. Claro, para mí no hay ley…la ley es de todo aquel que grite lo que quiere Chávez y la impunidad es su acompañante inexorable. Esa impunidad política y parcializada es la que hace que ahora el comandante Jairo se llene la boca amenazándome sin temer represalia legal alguna.
Indagando, he sabido que el susodicho al parecer se viste de Che Guevara y anda en una moto de costos revolucionarios. Sé que va todos los días, a las 11:00 am, al Ministerio de Salud. Algo le dan allí, día a día, que le motiva a ir con tal frecuencia. Me he enterado de que anda armado y que gusta de imitar al fallecido líder argentino-cubano en todo. Y como yo soy, para el Gobierno y el Estado venezolano, una ciudadana sin derechos, he querido dejar en los medios audiovisuales y en estas líneas, constancia de lo siguiente:
1.- No le tengo miedo. Tomo mis medidas…pero no voy a dejar de hacer lo que hago bajo ningún respecto; 2.- Cualquier cosa que me pase a mí o mi familia, tiene en el comandante Jairo al primer sospechoso; y 3.- En algún momento, cuando el país cambie y exista Estado de Derecho para todos, me ocuparé de que pague sus amenazas que son, de por sí, delito. Pero lo primordial no es el comandante Jairo. Lo básico es señalar que la impunidad adquiere visos cada vez mayores en una Venezuela donde las normas existen para todo aquel contrario al régimen…pero para quienes gritan "patria, socialismo o muerte", hay una patente de corso que permite amenazar, robar, amedrentar, estafar, secuestrar, etc. Todo ello en el marco de un gobierno lleno de militares que esgrimen un argumento político-social como justificación para no intervenir en la guerra diaria que libramos los venezolanos a fin de poder volver vivos a nuestras casas.
El verdadero culpable de este país sin ley, sin seguridad, es quien se nutre de ella para esparcir el miedo: Hugo Chávez, el rey del Estado venezolano.
Lo único que falta es la coronación para convalidar el hecho de que nuestras vidas, bienes y seguridad general están en sus manos…y solo en ellas. Gracias a Dios, tiene el sol en las espaldas y cuando eso sucede, usualmente todo comienza a salir mal.
NITU PÉREZ OSUNA
EL UNIVERSAL
miércoles 25 de agosto de 2010
Imagen Noticiero Digital
2 comentarios:
este disfraz de guerrillero debe haber presentado problemas de autoestima de pequeño que lastima disfrazarce de alguien que no es el para llamar la atencion
se llama humberto lopez
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