Israel
Publicado el 14.03.2010 13:22
Por Jaime S. Dromi
Nota: Este texto se extrae del comentario que el Dr. Jaime S. Dromi, realiza cada domingo en el espacio radial SHALOM ISRAEL por la 670 AM de Miami Florida y reproducido semanalmente en nuestro Portal
Shalóm Aleijem, Shavúa Tov. A todos mis amigos les deseo que la paz y la alegría reinen en vuestros corazones y en el de sus familias. Que tengáis una excelente semana, pero sin olvidar a nuestros hermanos dispersos por la faz de la tierra que, tan cerca de las fiestas, aún no tienen con que celebrarlas.
Yo no nací en este país y a mi nadie me persiguió, pero sin embargo elegí vivir en los Estados Unidos porque admiro la extraordinaria libertad individual que uno tiene aquí, los derechos que nos benefician y ciertamente las posibilidades económicas que uno puede encontrar aquí aún y a pesar de la terrible crisis que estamos pasando, pero la crisis pasará y, con la ayuda de D-os, nuevamente tendremos una larga época de prosperidad.
Miremos a nuestro alrededor y veamos lo terrible que están en otros países, en Cuba donde hasta hace poco no había gatos en las calles, porque gracias al comunismo de Castro se los tenían que comer, ahora Chávez los alimenta, también Cristina en la Argentina vive en parte de Venezuela y lo mismo con Morales en Bolivia, Correa en Ecuador y el bandido ese de Ortega en Nicaragua, miremos a Venezuela y derramemos una lágrima por ella, ese país hermoso, bueno y pacífico, ahora bajo la bota de ese tarado de Chávez que lo está llevando a la ruina con su despilfarro del erario público. Ese país lleno de todo que ahora está pasando hambre y donde la libertad desapareció. El problema más grande en Venezuela es que Chávez se puso del lado de Ahmadinejad del Irán y todo sabemos que puede salir de dos locos que se juntan, especialmente si llegaran a tener armas nucleares.
Y la situación en los Estados Unidos tampoco está bien. Nuestro querido presidente no se preocupa tanto de los 15 millones sin trabajo en este país, pero si se preocupa por los israelíes que decidieron construir unas cuantas casas de apartamentos en su Capital. No, no, la construcción no es en Washington, es en Jerusalém, creada hace 3007 años atrás por el Rey David como la capital de Judea e Israel. El Rey David no era árabe, Palestina no existió en ese entonces, ni existió después. Nunca hubo un reino, república, estado o cualquier otra institución política que se llame Palestina. Todo fue porque a un romano se le ocurrió borrar el nombre de Israel del mundo y le puso arbitrariamente ese nombre y ahora Obama y la Clinton muestran la hilacha, despachándose en contra de Israel.
Quien les dio el derecho que se toman llamando a Jerusalém “tierras en disputa”. Decir eso, ahonda la disputa, refuerza a los árabes que quieren luchar. Y, aparte de todo ¿qué significa “Tierras en disputa“? Nuevo Méjico, Arizona, Baja California, etc. son tierras en disputa, México sostiene que son suyas… pero en los Estados Unidos no van a parar de construir por eso. Israel tampoco va a detener la labor que está haciendo en Jerusalém, su eterna Capital. El Sr. Axelrod haría muy bien si se mira en un espejo antes de hablar mal de Israel, que recuerde el juramento que mantenemos 25 siglos,“si te olvidáramos Oh Jerusalém, que nuestra diestra se paralice y nuestra lengua quede pegada al paladar”.
¿Qué pretende la Secretaria de Estado Clinton? Ella es una mujer inteligente, se olvidó de que ella le dio armas a Osama bin Laden pensando que él va a ser un aliado, y… ¿piensa que Mahmoud Abbas va a ser presidente de los palestinos por largo tiempo? Palestina (si se crea), va a estar en manos del Hamas antes que cante un gallo. Por supuesto, la Sra. Clinton estará a salvo miles de millas de Jerusalém cuando los judíos deban luchar para poder sobrevivir; pero los árabes, como los vemos en Irak, en Pakistán, en Afganistán o en Argelia, o donde sea, se matan y matan, se suicidan matando a otros musulmanes, y si matan a musulmanes ¿Quién los va a parar de tratar de matar a los judíos?
No vivamos de sueños dulces. Hablemos de la triste realidad. Los árabes no están preparados para la paz, por lo menos no en esta generación, cuando fueron educados desde muy pequeños a odiar a los judíos, aunque ellos no odian a los judíos más de lo que odian a los cristianos. Esos odios están muy profundos y no los van a sacar con las palabras de Fayadd o Abbas, o de Clinton u Obama, miremos mejor a las intenciones declaradas por el Hamas y por el Hezbolláh y a sus patronos, los iraníes, que los arman y los financian a fin de hacer la sucia labor de matar judíos. Por supuesto, no oponerse a la matanza es criminal y menos todavía si uno es judío y no quiere morir. Miremos adelante y comprendamos al futuro, no permitiremos y, ciertamente no podemos permitir otro Holocausto y pedimos al mundo que nos ayuden a evitarlo.
Finalizo por hoy. Este es Jaime Dromi que les desea lo mejor y, si D-os me lo permite, volveré con ustedes la semana próxima. ¡Shalom!
JSD222@aol.com
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