Una Tribuna para voces del decoroEl 29 de noviembre de 2009, tuvieron lugar en Honduras las Elecciones Generales para elegir Presidente, diputados al Congreso Nacional y autoridades municipales. Un proceso electoral límpido en el que votó 62% de la población votante, y, que de acuerdo con la comparación estadística con las Elecciones del 2006, supero en casi 10 puntos, sellaría el triunfo de la democracia en el país.
En Honduras nunca quedaron en el olvido las elecciones o la campaña electoral mientras se desarrollaba una crisis política aguda, en la cual se enfrentaban las instituciones hondureñas apegadas al mandato constitucional con Roberto Micheletti a la cabeza; y, Manuel Zelaya, apoyado por la intervención principalmente de Hugo Chávez, con los países de la Alternativa Bolivariana para Las Américas (ALBA), aunado a la complicidad del Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), y, luego con la del gobierno de Lula da Silva, Presidente de Brasil y su Canciller Celso Amorin, de quien se tenía el concepto de llevar una de las cancillerías más profesionales del Continente.
La campaña electoral nunca fue suspendida a pesar del ambiente de crisis que sacudía al país, al contrario el gobierno interino le brindo a todos los candidatos amplias oportunidades para que expresaran su opinión, se reunieran con los mediadores, y continuaran con sus campañas..
El gobierno de Micheletti y el pueblo hondureño estaban convencidos que unas elecciones transparentes, organizadas por la autoridad independiente representada por el Tribunal Supremo Electoral, que en Honduras es totalmente autónomo sería la mejor vía para resolver la crisis que había fracturado al país. Unas nuevas autoridades elegidas democráticamente eran la forma de demostrarle al mundo la madurez política en Honduras.
Mientras Micheletti se apartó de la presidencia antes del proceso electoral para que no quedara duda alguna sobre su neutralidad; Zelaya llamó a los hondureños a amedrentar para que una nación que quería su país de regreso, no fuera a votar.
Mientras Micheletti declaró que “ cumplirá en el compromiso de entregarle el poder a Porfirio Lobo sin condicionamientos” (AFP) , Zelaya declaró que esas elecciones habían sido ilegales y que avalaban al “golpe de Estado de 28 de junio, 2009”.
Porfirio Lobo, candidato presidencial por el Partido Nacional ganó los comicios. En sus primeras declaraciones expresó: “Hoy Honduras ha decidido su propio futuro para terminar de una vez por todas con la crisis política”. Ofreció una “mano abierta franca y sincera para formar un gobierno de unidad nacional, de reconciliación”. “No es tiempo ya de más divisiones, es hora de sumar y multiplicar, dejemos atrás las diferencias, vamos adelante todos juntos por Honduras” (Noticias 24. 30/11/09)
Estados Unidos, Alemania, Colombia, Costa Rica, México, Panamá, Japón, Italia, Suiza, Indonesia, Emiratos Arabes Unidos y Francia. Reconocerán las elecciones y a las autoridades electas.
Argentina, Brasil, Venezuela, Nicaragua, Ecuador, Cuba, Bolivia, Paraguay y Uruguay, han dicho que no reconocerán las elecciones debido a que fueron realizadas bajo el “gobierno de facto” de Roberto Micheletti.
El gobierno interino de Honduras hizo respetar el mandato constitucional con toda firmeza, a pesar de haber tenido que enfrentar a la gavilla de la que fuera objeto por parte de la Comunidad Internacional, incluyendo a la OEA y la ONU, dando así un ejemplo de verdadera democracia a todas las naciones que hoy en día padecemos gobiernos que tienen como objetivo la implantación de gobiernos totalitarios..
La batalla dada por Honduras bajo la presidencia de Micheletti es comparable a la pelea entre David y Goliat.
¡Honduras David de América Venciste a Goliat!
Mercedes Monteromechemon99@yahoo.co.uk
* - El nombre Honduras: David de América tiene registro de autor (M.Montero / D.Duzoglou)
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