Es prudente cubrir los ojos en una tormenta de arena para no confundir un arroyo con un espejismo.
-Antonio Semprun-
Cnel. (GN) Antonio Semprun
Oficial de la Plaza Altamira
La dictadura y la democracia tienen características irrefutables, en la democracia existe alternabilidad del poder, se respetan los derechos humanos, los poderes del estado son independientes y la libertad de expresión es un derecho. En la dictadura se violan los derechos humanos, los poderes del estado están arrodillados a un caudillo, se amordaza la libertad de expresión y se manipulan las leyes para perpetuarse en el poder.
Los venezolanos todos, en cualquier lugar del mundo en donde nos encontremos debemos cerrar filas en defensa de nuestro país. El reciente anuncio de las sanciones del gobierno de los Estados Unidos a siete entidades foráneas, bajo los términos del Acta sobre sanciones a Irán de 1996, modificada por el Acta Integral de Sanciones contra Irán conocida como CISADA, de 2010, en razón de sus actividades en apoyo al sector energético Iraní que incluye a PDVSA, es una sanción a la dictadura impuesta en Venezuela por el Teniente Coronel Presidente. Es imperativo distinguir entre Venezuela como país y la revolución rojita, tomando en cuenta que la política exterior, el régimen la ha desarrollado no para beneficiar los sagrados intereses del pueblo venezolano sino para promover el proyecto personal del dictador venezolano en el que ha arrastrado a la primera empresa del país.
Si no fuese así, como entender la entrega de 100.000 barriles diarios de petróleo a Cuba en condiciones absolutamente desfavorables para Venezuela, ha hipotecado el país con China debido a la inmensa deuda contraída y al compromiso de suministro de petróleo venezolano a futuro (hasta por diez años) una evidente agresión y entrega de nuestra soberanía y patrimonio. Ciertamente, cada país es soberano en sus decisiones pero si no existiese un Irán que representa una amenaza nuclear para el mundo, no existieran sanciones a países representados por regímenes que lo apoyan en su afán de destrucción.
Así como cada país es soberano para decidir a quién le vende o no sus productos, cada país es soberano de las acciones a tomar para la defensa no sólo de su territorio y sus conciudadanos sino del resto de los países del mundo. Las sanciones impuestas responden a una política de disuasión contra el programa nuclear iraní el cual ha desafiado toda advertencia internacional, no sólo del gobierno de los Estados Unidos sino de la Unión Europea y las Naciones Unidas.
Las sanciones impuestas por Estados Unidos no es en contra de PDVSA como empresa venezolana, incluye a seis empresas mas que han suministrado apoyo al régimen de Ahmadinejad. Con este apoyo la dictadura venezolana no busca brindar la mayor cuota de felicidad posible a Venezuela y los venezolanos, sólo busca alinearse con la ideología del régimen Iraní en contra de las democracias de occidente.
PDVSA, envía a Estados Unidos aproximadamente 980.000 barriles diarios de petróleo, sin embargo las sanciones sólo se refieren a aspectos de financiamiento y licencias que ésta producción no requieren. Las actividades de producción en la Faja del Orinoco estarían esencialmente fuera de las sanciones, ya que son llevadas a cabo por empresas filiales de PDVSA.
Las sanciones tendrán un impacto financiero porque ocasionaran bajas en la cotización de los bonos emitidos o por emitir por parte de PDVSA ya que se incrementara el riesgo-país de Venezuela, uno de los más altos del mundo. Debido a los lineamientos erráticos del dictador venezolano que ha hecho de su idea de expansión universal bolivariana la política exterior de Venezuela. Chávez, perdió credibilidad por lo que ha tenido que recurrir a China como reemplazo de la banca internacional, nación a la que le ha hipotecado el futuro del país.
Es conveniente hacer un análisis quirúrgico de las sanciones impuestas a PDVSA, sin embargo la empresa venezolana continuará operando y enviando crudo a los Estados Unidos y Venezuela continuara recibiendo el caudal de dólares que genera la renta petrolera, dinero que será usado sin ningún tipo de control por el dictador venezolano para seguir expandiendo su revolución bonita y continuar llenando los bolsillos de sus acólitos, razón por al cual no dejará de enviarle petrolero al imperio
Ante esta ''terrible agresión'' foránea saldrán los miembros de la dictadura venezolana incluyendo al dictador a hacer un llamado al soberano tratando de despertar el sentimiento de nacionalismo para que se una en contra de la ofensa de la que ha sido objeto ''la dignidad y la soberanía nacional''. Olvidándose convenientemente que la dignidad y la soberanía de Venezuela ha sido ofendida y entregada reiteradamente cuando se ha cedido el territorio nacional para que sirva de zona de aliviadero y refugio a grupos narco guerrilleros y a miembros de grupos terroristas. PDVSA antes de las sanciones del gobierno americano ya era agredida por quien convirtió a la principal empresa del país en su bolsillo, en el de sus cómplices y en bolsillo de chulos extranjeros que la han desangrado.
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Cnel. (GN) Antonio Semprun
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