Cada vez que tratamos de expresar una opinión sobre lo que viene sucediendo en la PDVSA Socialista, la situación se nos complica. En primer término, porque mencionar PDVSA ya bloquea nuestra racionalidad en función del recuerdo de una empresa estatal clase mundial construida con mística y tesón; una empresa con defectos y problemas, pero también con la determinación interna de mejorar, de avanzar, de adaptarse a los retos de futuro. En segundo término porque en nuestra opinión se desvirtúa y se usa como pretexto el termino socialista, ya que, este no traduce, en términos reales y pragmáticos, la destrucción total de la esencia como empresa nacional de todos los venezolanos. Persuadidos estamos que correctamente debería adjetivarse como Comunista. Así, sin eufemismos, lo cual traduciría correctamente la esencia del término comunismo: destrucción, arrase, persecución, corrupción y desconocimiento intrínseco del significado de los límites nacionales y la soberanía, todo en función de un proyecto mundial sin fronteras y sin futuro.
De modo que esta PDVSA en su involución hacia la condición comunista, se ha dedicado a destruir y a poner al servicio de un proyecto ideológico en extinción su esencia, condenándose por ende, al fracaso, a su propia destrucción y a una agónica muerte que podría arrastrar en gran parte el futuro del país.
En nuestra opinión, no puede ser otra la explicación para tanto desatino y decisiones absurdas que se acumulan durante los últimos ocho años. Sin embargo, para no someternos al horrible suplicio de recordar este reciente pasado, sólo consideremos algunas de las acciones y decisiones más recientes.
Cuentos del Imperio Ruso.
Sin duda que la “venta” de crudo a Bielorrusia (también Belarús) que aun antes de su anuncio oficial y rimbombante, tratando de convencernos de su alto sentido nacional y patriótico, ya recibía 80.000 barriles diarios de crudo, es decir 2 millones 400 mil barriles mensuales, o lo que es lo mismo 30 millones de barriles al año de un crudo liviano de 32 grados API, producto de una mezcla de crudo Mesa con Santa Bárbara que se cotiza en el mercado en unos 75 dólares por barril, pero que es vendido, según el convenio con Bielorrusia con un descuento de 30%, lo cual significa, ni mas ni menos que un descuento anual de 600 millones dólares. Esto sin considerar que el viaje, ida y vuelta, significa 30 días, aunque en invierno podrían ser hasta 40 días con el consabido alto costo de flete, pagado por Venezuela. Además, consideren la posibilidad de nuevos acuerdos anunciados en Minsk, capital de Bielorrusia que nos indican un incremento en los embarques, a partir del año 2011, hasta los 200.000 barriles diarios, es decir, 6 millones de barriles mensuales y 72 millones de barriles anuales que se traducen en un descuento anual de 1 mil 440 millones de dólares.
Otro aspecto importante a considerar, en este “Acuerdo”, es que el crudo de Venezuela no llega directamente a Bielorrusia por barco. El crudo debe ser descargado en el puerto ucraniano de Odessa en el Mar Negro. Los primeros cargamentos, se enviaron a Bielorrusia usado la vía férrea, pero en adelante, y luego de un “acuerdo fraternal” entre Bielorrusia, Ucrania, Rusia y Venezuela, el crudo será descargado en Odessa y de allí, usando el oleoducto Odessa-Brody de unos 700 kilómetros, finalmente llegará hasta Bielorrusia. Esto no será gratis, ya que, deberá pagarse una tarifa de $1,30 por cada barril transportado por el oleoducto, de modo que, también los “panas” Vladimir Putin y Víctor Yanukovich
recibirán una pequeña tajada de la torta revolucionaria venezolana, ofrecida por Hugo Chávez pero pagada por todos los venezolanos. Por cierto este oleoducto también lo usa la empresa TNK-BP que recientemente adquirió los activos de Venezuela, en Alemania.
Nos preguntamos: ¿Puede este “negocio” con el “pana” Alexander Lukashenko que detenta el poder en Bielorrusia desde 1994, ser mejor para los intereses nacionales (para el pueblo pues), que vender esos mismos barriles, sin descuento con pago a 30 días y tan sólo 12 días de viaje ida y vuelta?, ¿Cuál otro puede ser el racional fuera del contexto político-ideológico-corrupción?
¿Venta de Activos o Expropiación?
La venta de los activos de Venezuela en el negocio petrolero aguas abajo en Alemania, era ni más ni menos que la crónica de una muerte anunciada. La primera adquisición venezolana en el proceso denominado internacionalización a finales de la década de los ochenta, siempre representó un negocio de ganancias modestas con una virtud importante desde el punto de vista de la determinación de participar en negocios internacionales. Por supuesto el teniente coronel Hugo Chávez miente de manera deliberada cuando afirma que nunca se procesó crudo venezolano en dicho sistema de refinación. Recordamos claramente los envíos de crudo La Rosa Mediano de 24 grados API, producido en la Costa Oriental del Lago y despachado desde La Salina. Para nadie era un secreto que el margen era pequeño y grandes las dificultades, pero un equipo que aprendía a comercializar en los grandes mercados internacionales, exploraba nuevos horizontes de cara al futuro, sustentaba y optimizaba cada espacio para lograr una rentabilidad y una presencia en el mercado internacional europeo. Recordamos también que producto de optimizaciones y negociaciones, se acordó con la Unión Soviética, triangular las entregas, vale decir nuestra cuota de suministro en las refinerías alemanas era suplida con crudo ruso y nuestro crudo venezolano suplía a Cuba, en nombre de la cuota rusa acordada con el régimen castrista. Todo en función de optimizar las economías del negocio ahorrando el flete y otros costos logísticos que reducían el margen.
Con la llegada de Alí Rodríguez Araque y su inseparable aliado Bernard Mommer, la muerte del convenio fue decretada, durante los últimos ocho años se habían buscado formas para salir del negocio, el cual repito, era modesto comercial y financieramente hablando, pero no ocasionaba pérdidas a la empresa. Otras eran las motivaciones para salir de los activos y podíamos intuirlas. El interés de grupos privados rusos por entrar en el negocio generó grandes presiones que finalmente se materializaron en la venta, apoyados en la coyuntura de la decisión de BP de vender activos alrededor del mundo, para afrontar los pasivos ocasionados por el derrame en el Golfo de México. El importante grupo privado ruso Alfa, participa en el negocio y todos contentos. Con relación al precio de venta de estos activos, no comparto la opinión orientada a pensar que fueron rematados o vendidos la precio de “gallina flaca”. Unos activos de refinación sin un convenio de suministro no representan un valor importante. Por tiempo, se había estimado un valor comprendido entre los 1 mil 400 y 1 mil 800 millones de dólares. Allí no está la esencia del cuestionamiento, lo que sería importante precisar son los términos y condiciones del pago, además de conocer cuál será el destino que se dará al mismo.
Finalmente, lo que si debemos dejar claro es que la PDVSA Comunista, está absolutamente orientada o, más bien, desesperada en salir de los activos ene le exterior. Para ello mienten y acusan, denuncian perdidas o reclaman dividendos. Lo que no dicen es que la producción mermada no alcanza para suplir los convenios de suministro unidos a las refinerías del complejo CITGO, por ello deben comprar crudos y gasolinas para honrar los compromisos, “comiéndose las ganancias”. Ya vendieron las refinerías de asfalto en la Costa Este de EEUU, un negocio altamente rentable para el comprador, en unos términos y condiciones que en algún momento deberán ser revisados. También se vendió su participación en Lyondell, aunque todavía deben honrar el convenio de suministro, es decir le envían crudo que se refina pero no participan del negocio. Ahora, se anuncia de manera clara, la decisión de vender CITGO, lo cual han venido urdiendo desde hace no menos de seis años. Pero ya es urgente, los compromisos crecientes con China, Cuba, Bielorrusia, Petrocaribe y otros, reducen cada vez más el suministro a los Estados Unidos y aumentan las compras. Adicionalmente, no olvidemos que las decisiones de los arbitrajes con Exxon-Mobil por 7 mil millones de dólares y Conoco-Phillips por una cantidad no determinada (estimamos pueden ser 20 mil millones), urgen la decisión de venta. Caso contrario, la palabra favorita de Hugo Chávez en los últimos tiempos, no podría sonar tan “revolucionaria”, en boca del Imperio: Exprópiese.
Nefasto para Venezuela, pero es una obra más de degradación en la PDVSA Comunista, en manos del trío Chávez-Rodríguez-Ramírez.
28 de Octubre, día del Ingeniero en Venezuela.
Hoy se celebra en Venezuela el Día del Ingeniero, conmemorando que el 28 de Octubre de 1861, se instala el Colegio de Ingenieros de Venezuela, en virtud del Decreto del Presidente de la República Manuel Felipe Tovar. Felicitaciones a todo los colegas que con ímpetu, dedicación y elevados principios éticos superpuestos a intereses personales o proyectos políticos contrarios al interés nacional, hemos dado lo mejor de nosotros para ejercer esta profesión según cada una de nuestras especialidades. Aquellos que contrariando la ética profesional y los intereses nacionales han ejercido o dejado de ejercer su profesión, en beneficio de intereses personales y/o políticos parcializados o han adelantado proyectos contrarios a nuestro Código de Ética, tengan en cuenta que la Patria y nuestra Institución Gremial les pedirán cuentas, más temprano que tarde. Felicidades a todos los ingenieros merecedores de ellas en su día!!!
Horacio Medina.
IMAGEN SUPERIOR: La patilla
IMAGEN INFERIOR: CubaEncuentro
REMISIÓN: Haydeé Irausquín
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