El barco hace agua

Nitu Pérez Osuna
pereznitu@gmail.Com

Con la crisis bancaria en la que estamos inmersos, la Asamblea Nacional y el resto de los poderes deberían estar reunidos de emergencia conociendo el
alcance de la misma. El Ministerio Público debería estar dando carreras para asegurarse que la banda de desfalcadores de los dineros de todos los
venezolanos, no se salga con la suya y vuelen como pájaros en sus aviones
fuera del país. Los ministros de Finanzas y Economía, presidente de Pdvsa,
presidente de Fogade, Sudeban, el Tesorero de la nación deberían estar
poniendo sus cargos a la orden por incapaces, ciegos, sordos o colaboradores por acción u omisión del robo a los venezolanos. Pero claro, esto es mucho pedir ya que -a la luz de las recientes denuncias del Ramos Allup- todos estos negociados cuentan con el visto bueno del alto gobierno, es una maraña de conexiones donde ellos mismos cobran y se dan el vuelto.

Por otra parte la oposición toda, hoy más que nunca unida, debe exigir
cuentas, demandar explicaciones, requerir información exhaustiva para
conocer la realidad de las finanzas venezolanas. Nadie puede quedarse
callado ante esta red de corrupción, quien guarde silencio es sospechoso de
ser financiado o al menos colaborador de estos empresarios y banqueros
rojos, rojitos que han dejado al país en la bancarrota. ¡Mosca pues!

Jaua deja el cinismo

"Nosotros no andamos en búsqueda de piscinas ni de mansiones, sino de los suelos agrícolas", dijo el ministro del P.P. para la Agricultura y Tierras,
Elías Jaua este lunes. Yo te aviso chirulí. Eso no es lo que vemos los
venezolanos. Todo lo contrario. Los chavistas boliburgueses andan en
tremendas camionetas blindadas, han adquirido mansiones en el este de la
ciudad de Caracas con piscinas incluidas y de ñapa compran aviones, yates y lanchas, por ser estos sus juguetes preferidos. Así que, ese cuento se lo
echará a otro. Cinismo puro el del Ministro dedicado a arrebatar a sus
legítimos dueños, tierras productivas, trabajadas y cultivadas por cientos
de trabajadores del campo y que para cumplir con el objetivo de la soberanía alimentaria. Resulta, Ministro que no hay azúcar, no se consigue aceite, el arroz escasea y hasta el papel de baño y las servilletas escasean. ¡Otro incapaz más! Y es que una se pregunta ¿Qué ha pasado con la cantidad de tierras ociosas que existen en el país, que son del Estado y que ni siquiera miran a lo lejos? Pues nada, esas no le interesan al Gobierno, los
revolucionarios quieren las que están bien acomodaditas para destruirlas,
que es lo único que saben hacer, porque es su especialidad.

Morirán de mengua

Los empleados públicos no deben ser beneficiados con pólizas HCM, dijo el primer mandatario en su pasado Aló Presidente… y ya hemos visto como dichas pólizas también han sido nido de corruptelas, sobreprecios y comisiones, esta es harina de otro costal. Ahora bien, esa afirmación del Presidente sería muy buena si en el país funcionara adecuadamente una red pública de salud. Pero sabemos perfectamente que los hospitales están literalmente en el suelo, no hay medicinas, los equipos, o no hay, o no funcionan y carecemos también de médicos venezolanos a quienes han desalojado de los hospitales para sustituirlos por unos cubanos de quienes desconocemos sus verdaderas credenciales. Así que, primero habría que dotar los hospitales, refaccionarlos, adecuarlos para brindar a los venezolanos una atención médica de calidad. Por cierto que el Presidente no se refirió a las pólizas HCM de los militares. ¿Será que a esa casta si le corresponde tal privilegio? ¡Civiles abran los ojos!